Como en una pareja, las crisis de comunicación interna no suelen surgir de un día para el otro. Los problemas van corroyendo gradualmente a la organización y a las personas. ¿A qué síntomas deberíamos estar atentos, antes de que el daño sea grande?
- Demasiadas quejas de los clientes
¿Qué tiene que ver esto con la comunicación “interna”? Puede ser un signo de que los miembros de tu empresa no están en sintonía. Empleados felices = clientes felices. Pregúntate si tu estrategia de CI está contribuyendo a que esto suceda.
- Empleados con miedo a preguntar
Deberían sentir que ninguna pregunta es estúpida. Si pedir feedback o ayuda los pone ansiosos, cuidado: podrían hacer suposiciones o esconder errores importantes.
- Empleados descontentos
Según Harvard Business Review, uno de los factores que alimentan la insatisfacción es sentirse marginado o “fuera del loop”. Y esta es, justamente, una de las principales tareas de la comunicación interna: mantener a todos bien informados.
- Baja participación de los eventos empresariales
¿Cuántas personas fueron al último after office? ¿Cuántas se apuntaron al juego o desafío que lanzaste, o se ofrecieron para el voluntariado que organiza el sector de RSE? El bajo nivel de participación de este tipo de eventos puede indicar: 1) que los empleados no recibieron el mensaje o 2) que no los “impactó” como hubieras esperado.
- Más errores (y costosos)
Si los empleados están cometiendo errores con mucha frecuencia, puede ser un síntoma de que les falta un rumbo y expectativas claras por parte de la gerencia. Estos errores pueden reducirse con un proceso fluido de CI.
- Alta rotación de personal
Por todo lo anterior, es muy posible que las personas renuncien al trabajo. Los empleados se marchan cuando se sienten insignificantes, perdidos con respecto a sus tareas o cuando los dan por sentado. ¡Es hora de hacer un diagnóstico de tu comunicación interna!
¿Qué otro síntoma sumarías a esta lista?
